Los inmuebles deben cumplir una serie de características para que se pueda vivir en ellos. Hay diferentes factores que se tienen en cuenta y en las siguientes líneas queremos que conozcas uno de ellos, por eso, te mostramos cómo influye la ventilación en la cédula de habitabilidad de un vivienda. 

  • ¿Qué es la cédula de habitabilidad de una vivienda?

La cédula de habitabilidad de una vivienda demuestra que esta cuenta con todas las condiciones que son indispensables para ser habitadas, según la normativa de habitabilidad. Dentro de estas condiciones, se dan una serie de características que debe tener el espacio para que se pueda vivir en su interior. Están relacionadas con los siguientes aspectos:

  • Unas dimensiones mínimas.
  • Ventilación e iluminación natural, tanto en los dormitorios como en el resto de habitaciones principales, que deben contar con ventanas.
  • Cumplir con una serie de normas de seguridad y no tener deficiencias estructurales ni problemas constructivos de gravedad.
  • Debe contar con las instalaciones mínimas, como energía eléctrica o agua corriente. 
  • ¿Cómo influye la ventilación en la cédula de habitabilidad de las viviendas?

Como ya has visto en el apartado anterior, las viviendas deben contar con ventanas, ya que es uno de los aspectos que más influye para que la casa se pueda habitar y resulte confortable para sus moradores. 

Las ventanas permiten que entre en la vivienda luz natural. Este hecho no solo supone un ahorro energético, sino que también influye en la decoración de la propiedad y lo que es más importante, en la salud de quienes la habitan.  Debes tener en cuenta que reducen la humedad del ambiente, por lo que evitan que se formen humedades de todo tipo o incluso moho. 

Además, a nivel emocional contar con luz natural provoca que la persona tenga un mejor estado de ánimo y se sienta más feliz en el interior de su propio hogar, algo que resulta fundamental. 

Por todo ello, para obtener la cédula de habitabilidad las viviendas deben cumplir una serie de requisitos relacionados con la ventilación. Como ya hemos comentado, la vivienda debe contar con ventilación natural al exterior. Existen dos casos diferentes, que son estos:

  • Ventilación utilizando las ventanas. Es importante que la superficie de las ventanas ocupen alrededor del 10 % de la superficie total de la habitación en la que se encuentran ubicadas. Se pueden emplear los mismos huecos que se utilizan para la iluminación. Tanto los baños como los aseos pueden tener ventilación por medio de ventanillas o sumideros. En cuanto a los pasillos y los recibidores, no será necesario que cuenten con una ventana.
  • Ventilación continuada de toda la vivienda. La totalidad de la vivienda debe contar con un sistema de ventilación continua las 24 horas del día. De esta forma, aunque la propiedad esté totalmente cerrada existirá en todo momento una corriente de aire que atravesará toda la vivienda y así se podrá renovar su aire viciado. 

Es importante destacar que además del tamaño de las ventanas y de esta ventilación continua, también se debe cumplir con otra condición y es que las ventanas comuniquen con un espacio que esté ubicado en el exterior. 

Si la ventana da a un patio interior, este tiene que tener una superficie en planta de al menos 4 metros cuadrados para que sea considerado como un espacio exterior. En cuanto a las galerías, para que sean consideradas como un espacio exterior deberán contar con una superficie acristalada de abertura superior a la superficie en planta de la galería. 

Si tienes dudas sobre cómo influye la ventilación en la cédula de habitabilidad de una vivienda, ponte en contacto con nuestro equipo y te daremos la ayuda que estás buscando.