Cómo rebajar el nivel de gas radón en casa

El gas radón es un veneno que afecta a la salud de las personas y también a nuestros edificios. Como ya explicamos anteriormente, el radón es un veneno muy perjudicial y dañino para los seres humanos, y que está considerado como la segunda causa de mortalidad en los cánceres de pulmón. Rebajar el nivel de gas radón en nuestros hogares, si estamos en una zona de riesgo, es primordial.

Tanto es así que la Unión Europea ha tomado cartas en el asuntó. A partir de este año 2018 que no hace mucho que empezó, el gas radón ha de ser eliminado de los hogares y de los lugares de trabajo. El organismo comunitario fuerza ahora a España a que se combata la proliferación de este gas natural que nace del suelo y emite partículas radiactivas que son inhaladas por los pulmones.

El gas radón no tiene sabor, ni olor. Tampoco color ni es visible. Pero se deposita en las células que recubren las vías respiratorias y puede dañar el ADN, llevando al cáncer de pulmón en demasiados casos.

Es por ello que la Unión Europea ha instado al Gobierno español a tomar medidas contra el radón. ¿Cómo? Desde este año, el organismo comunitario obliga a realizar mediciones periódicas de este gas. La normativa aprobada por la UE establece medidas de protección para frenar la entrada del gas a las casas. En los lugares donde se alcancen los 300 becquerelios por metro cúbico -unidad en la que se mide el radón– tendrán que tomarse medidas de reforma.

También se obliga desde ya a edificar siguiendo unos requisitos que logren una protección suficiente en las estancias. Sobre todo en las zonas del país con mayor afectación por gas radón.

Para protegerse frente al gas radón, la Organización Mundial de la Salud ofrece algunas opciones principales, que ya comentamos previamente:

• Mejorar la ventilación. Sobre todo en la zona del subterráneo, donde suele originarse el gas.
• Utilizar sistemas de extracción mecánica en el sótano para extraer el radón en lugares de alta concentración.
• Tapar filtraciones. Cualquier pequeña fisura puede ser letal para la entrada del gas.
• Realizar un sellador de las paredes exhaustivo.

Aun así, podemos ir más allá para protegernos de este malvado gas y tener en cuenta otra serie de recomendaciones para evitar que llegue a nuestros pulmones.

¿Qué hacer para rebajar el nivel de gas radón?

Protegerse contra este veneno y rebajar los niveles de gas radón en nuestros edificios puede ser sencillo de realizar si sabemos cómo.

Por supuesto, mejorar la ventilación es el método más eficaz. Pero no la única forma. Hemos dicho previamente que el sellado de toda grieta es importante, pero para asegurarnos podemos ir un paso hacia adelante. Hay que sellar toda junta especialmente de los edificios subterráneos. Las bodegas, los garajes y los trasteros han de ser impermeables, no han de permitir ninguna fuga.

Si ya hay una afectación de este contaminante, para rebajar el nivel de gas radón puede instalarse un ventilador y un sistema de tubería para sacar el radón del suelo.

De manera temporal, podemos abrir las ventanas y los respiraderos para respirar aire de fuera. El aire del exterior, normalmente, tiene un contenido bajísimo en radón. Es el aire del subterráneo y de interiores que suele estar afectado. Necesitamos crear una corriente abriendo las ventanas de ambos lados del hogar, no únicamente una ventana. E incluso es posible utilizar ventiladores para mayor extracción de aire.

Al mismo tiempo, podemos cerrar las entradas y pasos de los sótanos y subterráneos hacia las plantas superiores. Estas medidas, si bien temporales, pueden lograr rebajar el nivel de gas radón en nuestras viviendas.

Desgraciadamente, estas medidas son temporales. Para poder eliminar el gas de nuestras casas, será necesario el sellado de todas las grietas y aperturas. Es posible usar resina que sea impermeable para ello.

Todo ello hasta que el nivel de gas radón sea muy elevado. En esos casos, ya será necesario un sistema para succionar desde el subsuelo. Porque los sistemas de ventilación nos protegen en el hogar contra este veneno, pero igualmente necesitamos acabar con el gas que está almacenado en el subsuelo. Se puede realizar una extracción mecánica instalando un tubo y un extractor.

Tras haber eliminado el gas radón en un hogar, lo imprescindible es realizar una prueba de medición para saber cuánto gas queda en el ambiente. En cualquier caso, debe de haberse logrado rebajar el nivel de gas radón. Pero si no fuera así, lo que nos queda es hacer un rediseño del hogar con profesionales que nos asesoren. Pero, desde luego, lo que no podemos hacer es estar en convivencia con el gas radón, un veneno que puede ser el peor que tengamos en casa. Al menos de los que no son visibles ni detectamos su presencia.