La normativa de ventilación de edificios en España está regulada en nuestro país por el CTE de ventilación y el RITE. Esas siglas corresponden, respectivamente, al Código Técnico de Edificación y al Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios. Otra normativa de referencia es el Real Decreto 390/2021, que marca los requerimientos para la certificación energética en edificaciones.

Qué es el CTE de ventilación

El Código Técnico de Ventilación fue aprobado en el año 2006 mediante un real decreto. Desde entonces, ha experimentado varias modificaciones, aunque su finalidad principal es la misma. Busca establecer unos estándares de calidad básicos para garantizar la seguridad y la habitabilidad en los edificios.

Por tanto, es un conjunto general de normas producto del desarrollo de la Ley 38/1999 de 5 de noviembre, de Ordenación de la Edificación (LOE). Por otro lado, no debemos olvidar que también contempla requisitos técnicos en materia de accesibilidad como consecuencia de lo establecido en la Ley 51/2003 de 2 de diciembre. Dicha norma es la referente a la igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad.

La sección HS-3 del CTE de ventilación trata de la calidad del aire interior. En el apartado de «Generalidades» se contempla el ámbito de aplicación:

  • Edificios de viviendas y su interior.
  • Almacenes de residuos.
  • Trasteros.
  • Aparcamientos y garajes, incluidas las zonas de circulación de vehículos.
  • Edificios de cualquier otro uso.

Los locales de otra naturaleza que no se incluyen en esta lista están sometidos a los requerimientos que figuran en el RITE.

Asimismo, el CTE de ventilación hace referencia a condiciones de:

  • Diseño de los sistemas de ventilación.
  • Elementos constructivos.
  • Productos de construcción.
  • Mantenimiento y conservación.

Dados todos los requerimientos que se indican, en muchos casos resulta necesario que instalemos sistemas de ventilación mecánica controlada.

Conceptos principales de la normativa de ventilación de edificios

La normativa de ventilación de edificios incluye dos exigencias básicas. La primera es que las edificaciones están obligadas a dotarse de herramientas para una adecuada ventilación. Estas tienen que garantizar la eliminación de sustancias contaminantes generadas por la actividad cotidiana en esas instalaciones. De igual manera, se tiene que suministrar el necesario aire proveniente de fuera de la edificación. Sumado a esto, se debe extraer el aire contaminado.

La segunda hace referencia a la cubierta de la instalación. Esta ha de ser, por norma habitual, el lugar por el que salgan las sustancias resultantes de los procesos de combustión. Con esta exigencia se busca prevenir la contaminación del aire dentro de la edificación. Así también se limita la posibilidad de que el aire contaminado se vierta por las fachadas o patios.

Además, en el CTE se reflejan otras cuestiones relevantes, como:

  • Especificaciones sobre las aberturas de ventilación.
  • Características de los conductos de extracción.
  • Requisitos de los aspiradores híbridos, aspiradores mecánicos y extractores.

En este sentido, se deja clara la obligatoriedad para las viviendas de poseer sistemas de ventilación. En ellas, la circulación del aire ha de producirse de las zonas secas a las húmedas. Por tanto, estancias como los dormitorios, la sala de estar o el comedor tienen que disponer de áreas de admisión de aire. La cocina y el cuarto de baño han de contar con zonas de extracción, que pueden ser extractores. Por último, entre las áreas admisión y extracción han de habilitarse aberturas de paso.

Para cumplir con esta normativa, resulta básico el asesoramiento de especialistas, ya que el CTE de ventilación incluye numerosos requisitos. Además, ha servido para adaptar diversas directivas europeas sobre eficiencia energética y protección contra el radón. En este último caso, es fundamental que sepamos cómo eliminar el gas radón a través de la ventilación.