Cáncer de pulmón por gas radón, ¿cómo se manifiesta la enfermedad?

A partir de los 50 años, puede manifestarse en nosotros uno de los tumores malignos más temidos, el cáncer de pulmón. En otros casos, en cambio, puede llegar antes o después, pero en la mayoría suele ser en la cincuentena. Y teniendo en cuenta que se trata de una de las peores enfermedades que podemos padecer, ¿no deberíamos preocuparnos de sus causas? Sobre todo sabiendo que el segundo mayor causante de los cánceres de pulmón es el gas radón.

Este gas es una sustancia casi indetectable que está presente en muchos hogares españoles. Normalmente, la población se preocupa de los tumores malignos de pulmón teniendo en cuenta los efectos del tabaco, tanto en fumadores como en no fumadores, ya que es la principal causa de la dolencia. Pero no son determinados trabajos o la contaminación el siguiente causante de la enfermedad, sino el gas radón, por lo que hemos de estar preparados para ello si estamos en una zona de riesgo.

¿Cómo se manifiestan los primeros síntomas del cáncer de pulmón por gas radón? Suelen aparecer en varones a partir de los 50 años, si bien hay un 11% de casos en personas menores de dicha edad y un 22% de mujeres. Normalmente, los pacientes que sufren dicha enfermedad suelen darse cuenta tras una infección pulmonar difícil de curar. Ese es un momento clave para saber si podría haberse contraído la dolencia.

El problema es que muchas personas piensan que, si no son fumadoras, no existe el riesgo de que aparezca este tumor maligno. Nada más lejos de la realidad. Según un estudio de la consultora médica Small Cell, con altas concentraciones de gas radón fácilmente pueden sufrir cáncer de pulmón los no fumadores.

El problema es que el diagnóstico se realiza cuando el cáncer está ya en fase metastásica. ¿Qué significa esto? Básicamente, que ya está extendido y que necesitará tratamiento. También pueden mirarse datos para tener en cuenta la influencia del gas radón. Según el mismo estudio de Small Cell, se analizaron 113 casos en Galicia -la región más afectada- y de ellos hasta 63 tenía una afectación este gas. Si bien es cierto que en muchos casos el problema era una combinación de gas radón e influencia del consumo de tabaco.

¿Qué es el gas radón y cómo provoca cáncer de pulmón?

El gas radón es un gas incoloro e inodoro casi imposible de detectar que se genera en el subsuelo de muchos de los hogares de nuestro país, sobre todo si tienen sótanos. Se puede filtrar por toda la casa y llegar a causar verdaderos problemas de salud. Tal y como informa la Organización Mundial de la Salud, el radón es el segundo culpable de los cánceres de pulmón.

La única forma de saber si vivimos en un inmueble afectado por el radón es con unos medidores especiales, que ahora mismo las autoridades regionales pueden ofrecer en lugares del mapa del radón, que explican las zonas en España donde se concentra el gas. La región más afectada es Galicia, donde se estima que dos de cada tres ayuntamientos tienen algún caso de radón en su zona.

La mejor manera de combatir el gas radón y evitar complicaciones por cáncer de pulmón es instalar en el hogar sistemas de ventilación que renueven el aire, además de mejorar la estanqueidad de los edificios, con un mejor acondicionamiento de ventanas y puertas para evitar la filtración del gas.

Tener un hogar en una zona afectada por gas radón no significa que debamos olvidarnos de dicho inmueble, pero sí que hemos de extremar las precauciones.

¿Cómo hemos llegado a esta situación por falta de renovación de aire?

El problema del gas radón no es culpa de aquellos que disponen de un inmueble afectado por este veneno, pero sí es una pena que se haya llegado a esta situación en España cuando ya se conocía este conflicto. Así lo explica el director del grupo de investigaciones sobre el radón en la Universidad de Cantabria, Luis Santiago Quindós. Según él, ya hace 40 años se conocían los efectos dañinos del gas radón. El problema ha sido la falta de percepción y la mínima regulación.

Según Quindós, el problema ha sido que los constructores nunca primaron maximizar la seguridad de los hogares en materia de este gas, y que en cambio optaron por abaratar los costes. Una situación que podría haberse evitado, y que no se ha puesto en boca de todos hasta que la Unión Europea tomó cartas en el asunto y forzó una normativa comunitaria. Desde este año, todas las zonas afectadas por gas radón pueden disponer de medidores gratuitos y se ofrecen ayudas a aquellos que puedan estar afectados.

Sin embargo, se podrían haber evitado muchos casos de cáncer de pulmón por gas radón. Un veneno que afecta en cualquier hogar con escasa ventilación, sin importar si es de granito o es de nueva construcción, dos de los mitos de este veneno que se cuela en nuestras casas.