Aire acondicionado

Los sistemas de aire acondicionado son conocidos por ser los aparatos habituales para enfriar una estancia. Sin duda, son los más comunes en cualquier lugar. Pero también se reconoce que son los que más consumen y los que un mayor número de energía desperdician. Están muy lejos de la eficiencia energética, si bien son capaces de enfriar una estancia al mínimo.

¿Cuál es la alternativa al aire acondicionado? Para muchos, es el ventilador. Pero un ventilador normal solo puede remover el aire, no renovarlo y, si bien es económico, no logra dar una buena sensación de confort en el hogar.

Si hay una solución que sí es capaz de suplir al aire acondicionado en sensación de bienestar y de gozar de unas buenas temperaturas en casa, esa es la proporcionada por los sistemas de ventilación mecánicos. Y en especial los de doble flujo.

La diferencia principal entre los equipos de aire acondicionado y los sistemas de ventilación mecánicos es que los primeros enfrían el aire de una estancia mientras que los segundos lo que hacen es renovarlo.

En muchos casos, incluso en el verano de nuestro país, es suficiente con un sistema de ventilación mecánico para eliminar la alta sensación térmica y disfrutar de una temperatura agradable en casa.

 

Pros y contras de un sistema de aire acondicionado

 

Los equipos de aire acondicionado se llevan utilizando desde hace muchas décadas. En realidad, su uso se data desde el principio del siglo pasado. En todo este tiempo, se han ido mejorando para reducir mucho su tamaño, hacerlos más silenciosos e incluso que consuman algo menos.

Ahora mismo, los sistemas de aire acondicionado están implantados en prácticamente todos los lugares de trabajo y comerciales de España y en muchísimos de los hogares. Su tamaño es ajustado -si bien siguen necesitando una unidad en cada uno de los lugares a refrigerar- y cada vez son más silenciosos.

Podría decirse que para enfriar una estancia es la solución más eficaz, ya que su funcionamiento se basa precisamente en eso, en introducir aire frío.

Sin embargo, esto tiene una serie de contraindicaciones que hace que los equipos de aire acondicionado deban usarse de manera esporádica:

  • El funcionamiento del aire acondicionado necesita un compresor que al sobrecalentarse enfría el gas que luego enviará aire frío al interior de la estancia. Este proceso es poco ecológico ya que envía aún más aire caliente al exterior en verano.
  • Un sistema de aire acondicionado no es energéticamente eficiente. Al contrario, necesita de mucha energía para el proceso.
  • Estos equipos de enfriamiento no son capaces de variar la temperatura del aire que envían a las estancias. Suelen enviarlo a una temperatura entre los 9 y los 12ºC, y cuando el termostato detecta que se ha llegado a la temperatura seleccionada, se para y solo ventila. Sin embargo, la mayoría de equipos no son capaces de medir bien la temperatura de la estancia, por lo que es común que enfríen más de la cuenta.
  • Con un sistema de aire acondicionado no se renueva el aire, sino que se enfría la estancia. Así que cuando se deje de utilizar, el aire cálido tardará poco en volver a situarse.
  • El aire viciado no se elimina con este tipo de equipos, sino que se queda en el ambiente.

Es por todo ello que el aire acondicionado tiene una serie de inconvenientes que lo convierten en una opción poco económica y, más importante, de difícil futuro en la era de la eficiencia energética. Más aún ahora que la Edificación de Consumo Casi Nulo es una realidad.

Para encontrar una fórmula capaz de asegurar una renovación del aire que se traduzca en confort térmico, sin un gasto desmesurado y de forma ecológica, la mejor opción es un sistema de ventilación mecánica de doble flujo.

 

Ventajas de la ventilación mecánica

 

Sistemas de ventilación con caudal constante doble flujo

La mejor solución para la ventilación total de una casa es la ventilación mecánica de doble flujo. En este caso, no se emite aire frío para bajar la temperatura de un recinto, sino que se renueva el aire, que además llega filtrado.

En este proceso, lo que se logra es una circulación del aire. Esto lo que hace es que en todo momento se está eliminando el aire viciado del lugar, e introduciendo aire nuevo filtrado.

El enfriamiento no es tan grande como en los equipos de aire acondicionado, pero en una casa donde se haya cuidado la construcción se logra que no sea necesario enfriar el aire. Además, la ventilación mecánica de doble flujo hace el hogar mucho más saludable al renovar el aire e introducir únicamente aire filtrado.

Los sistemas de ventilación mecánicos tienen un gasto muy pequeño, similar al de una bombilla, por lo que son una solución muy eficiente en relación al ahorro de energía. Los sistemas de ventilación están en funcionamiento constante y no han de utilizarse de forma aleatoria como el aire acondicionado.