Ventilar un parking

Los lugares que destinamos a los aparcamientos requieren unas necesidades de renovación del aire mucho mayores que otros espacios. Por la altísima contaminación a la que están sometidos, los cuidados que requieren son mucho mayores. Ventilar un parking es una tarea que, además de que necesita ajustarse a la normativa, requiere de mucho trabajo.

Los aparcamientos generan grandes niveles de contaminación al tener un paso constante de vehículos en un espacio cerrado. Pueden llegar a ser espacios muy peligrosos para las personas, por lo que la contaminación ha de extraerse de la mejor manera. No obviemos tampoco que están expuestos a los problemas que pueden originar los vehículos, como pueden ser los incendios.

La clave en un aparcamiento es evacuar la contaminación y los gases que puedan originar alguna combustión, para evitar precisamente ese riesgo por incendio. Además, la construcción del parking ha de seguir una normativa muy estricta para poder ser evacuado en caso de problemas. Regulaciones que generan muchas dudas entre quienes han de encontrar una solución para la ventilación de un aparcamiento.

Para ventilar un parking, podrá optarse por un sistema de ventilación mecánica o uno natural, existiendo la posibilidad de una solución mixta de ambos. Los dos métodos tendrán que regirse por la normativa de ventilación en aparcamientos, que tiene una serie de indicaciones y obligaciones para cada caso. Todo ello se encuentra recogido en el Código Técnico de la Edificación.

 

Ventilar un parking de manera mecánica o natural

 

Ventilación en parking

Las necesidades de ventilar un parking nacen de la precaución para evitar la falta de oxígeno que puede producirse por culpa de los gases que emiten los vehículos de motor. Principalmente, existen sistemas de ventilación mecánica o natural, dependerá de las necesidades del lugar optar por uno u otro.

Empezando por los sistemas de ventilación natural, se debe disponer de aberturas mixtas en dos zonas opuestas de la fachada. El reparto de aire ha de ser natural y el recorrido libre de obstáculos, para que el aire entre y salga de manera efectiva.

Los medios de ventilación mecánica son aptos para unas condiciones de tamaño superiores y cuando el recinto está cerrado. Sobre todo en zonas subterráneas. En estos casos, la ventilación y el sistema instalado han de ser para uso exclusivo del aparcamiento. Puede realizarse solo la extracción del aire de manera mecánica, o bien tanto la acción de retirar el aire como de introducirlo.

Las aberturas de ventilación han de respetarse según lo que se indica en la normativa, ya que se ha de garantizar que no se producen estancamientos de los gases contaminantes. Los sistemas de ventilación que se instalen han de introducir aire fresco del exterior y sacar el aire contaminado del aparcamiento. Los sistemas tradicionales hacen uso de conductos y ventiladores, si bien recientemente son más populares los métodos de túnel, conocidos también por el término en inglés jet fans.

Este sistema de jet fans lo podemos ver de manera muy habitual también en túneles de carretera. A la hora de ventilar un parking, se trata de una novedad frente a los sistemas tradicionales. Pueden complementarse con los sistemas de ventilación tradicionales. Su funcionamiento es el de generar un efecto que distribuye el aire fresco por el aparcamiento gracias a que genera barridos en desplazamiento vertical de las zonas a ventilar.

Se trata de una solución tecnológica que permite eliminar los gases de manera más eficaz. Se trata, eso sí, de un sistema bastante más caro de instalar, si bien tiene un ahorro posterior en los costes energéticos. Son una buena solución también en los parkings de techos no muy altos.

En todo caso, el uso de jet fans dependerá enormemente del tipo de parking en el que se encuentren. Como hemos dicho, es posible optar por sistemas de ventilación naturales o mecánicos, en función del lugar donde se aloje el aparcamiento. Las soluciones de túnel, sin duda, son eficaces cuando se trata de subterráneos sin ventilación y techos muy bajos, situaciones que requieren de una mayor ventilación.

Por otro lado, se ha de tener muy presente qué hacer en caso de incendio en un aparcamiento. Cabe recordar que los gases y contaminantes que pueden hacer combustión están presentes en todo momento. En estos casos, los aparcamientos son lugares de mayor riesgo porque su acceso y salida son de difícil paso. La evacuación en caso de peligro es difícil si el parking está lleno.

Se instale el sistema que se instale, es primordial poder garantizar una evacuación óptima y también que los productos de combustión puedan ser extraídos de la forma más rápida. Es posible que se generen incendios y también que los gases sean nocivos para las personas. Incluido para los bomberos en caso de que se produzca un incendio.

Ventilar un parking es una tarea importante por el riesgo que una mala ventilación tendría para todos los usuarios del recinto. Lo ideal es realizar un estudio y ver si puede optarse por ventilación natural, o si hay que invertir en ventilación mecánica o sistemas avanzados como los jet fans.