Pozo canadiense como sistema de captación de energía geotérmica

¿Sabes qué es la energía geotérmica? Se trata de una fuente de energía renovable que pretende sacar el máximo rendimiento al calor natural que existe en el interior de la Tierra. Con esta energía del subsuelo podemos calentar el agua del interior de nuestros hogares, climatizar el aire interior e incluso, con diferentes técnicas de vapor seco, producir electricidad. En el presente artículo nos centraremos en el pozo canadiense, o provenzal, una instalación basada en la geotermia que aprovecha la inercia del subsuelo para climatizar (calefactar y refrigerar) nuestros edificios.

¿Cómo funciona un pozo canadiense?

Efectivamente, el pozo canadiense permite refrigerar nuestra vivienda en verano y mantenerla caliente en invierno. ¿Cómo lo consigue? Su funcionamiento es sencillo: se basa en el principio básico según el cual la energía calorífica se desplaza de los cuerpos más caldeados a los menos calientes.

Se trata de perforar el subsuelo y construir una serie de cavidades o conductos por los cuales circulará el aire. Dado que cuanto más profundo, más caliente, deberemos cavar dichos conductos a la profundidad deseada. Dichas tuberías posibilitarán que se produzca un intercambio de energía entre la cavidad por la que circula el aire y la tierra circundante, pues, como hemos dicho antes, el calor se desplaza desde las superficies más cálidas hasta las más frías.

Durante la época invernal, la temperatura del aire exterior es más baja que la del interior de la Tierra. Si circula aire con temperatura muy baja por el interior de los conductos, el subsuelo cederá su calor y atemperará este aire. Una vez atemperado, podremos utilizar este aire caliente para calefactar nuestros hogares prescindiendo de los sistemas tradicionales de calefacción.

Durante la época estival sucede lo contrario: la temperatura del aire exterior es alta. Si hacemos circular este aire caliente por el interior de los tubos, este cederá calor a la tierra circundante y se refrescará. Este aire refrigerado podrá ser empleado para refrigerar nuestra vivienda.

Ejemplo práctico

En la actualidad existen numerosos edificios que utilizan esta técnica de climatización sostenible y respetuosa con el medioambiente, como el edificio industrial y administrativo Schwerzenbacherhof de Zürich, Suiza. Este edificio consigue refrigerar el aire del interior de los recintos cuando la temperatura del aire exterior excede de los 22ºC. Gracias al pozo canadiense, en los día más calurosos del verano, la temperatura del edificio se mantiene entorno a los 24,7ºC.

Partes del sistema

Un pozo canadiense se compone de los siguientes elementos:

• Captación de aire. Se trata del punto en el que la instalación geotérmica toma aire del exterior.

• Filtros. En el punto de captación de aire se instalan una serie de filtros para impedir que el polvo y la suciedad penetre en los conductos enterrados.

• Intercambiador de energía. Se trata del propio conducto, que actúa como intercambiador de calor entre el interior de la tubería y el subsuelo.

• Drenaje. Lugar en el que se elimina el agua que se pueda generar en el interior de los conductos.

• Elemento para impulsar el aire. Se trata de un elemento (ventilador) que aspira y el aire y lo hace circular.