Motores de ventilación

Uno de los retos más importantes de la Unión Europea es la búsqueda de la eficiencia energética en todo su territorio. En el seno del grupo de países recogidos bajo el paraguas de la institución siempre se han implantado medidas pioneras en la ecología y en la búsqueda de recursos alternativos. También en el caso de los motores de ventilación, a los que se les exige que cada vez hagan gala de un menor consumo.

La eficiencia energética es también una forma de hacer frente a la crisis que trae la escasez de recursos energéticos, además de reconvertir las industrias para que nuestro gasto en suministros sea menor y ayude a frenar el cambio climático. Una de las directivas que ahora mismo tiene en marcha la UE es la que se aplica a los productos conocidos como ErP. Dichas siglas significan Energy-related Products, lo que en inglés significa productos relacionados con la energía.

El nombre técnico de la directiva que afecta directamente a los motores de ventilación es Ecodesign 2009/125/EC. En ella se marcan unos requisitos obligatorios de diseño ecológico, respetuoso con el medio ambiente, que también es importante para los aparatos de aire acondicionado o las calderas.

Esta directiva se enmarca dentro del objetivo de la Unión Europea por reducir el consumo en un 20%. También se apuesta para lograr que el 20% de la energía sea producida por renovables. Y todo ello con una fecha límite para el año 2020. Por eso, al objetivo de esta directiva se le conoce como 20-20-20. Se favorece el diseño respetuoso con el medio ambiente y se apuesta por reducir el volumen de emisiones de CO2.

 

Ecología y motores de ventilación

 

eficiencia energética en motores de ventilación

La Comunidad Europea estima que la mayor parte de la potencia eléctrica demandada por los países miembros pertenece a los motores que requieren de electricidad dentro de los procesos de producción. Esta necesidad podría ser, aproximadamente, el 70% de la electricidad que se necesita en industrias.

 

Para determinar el consumo de los motores de ventilación y de otros se creó una clasificación conocida como el código IE con cuatro categorías. IE1 es la menos ahorradora dentro de este grupo y IE4 es la que mayor eficiencia energética logra. Por ejemplo, IE 1 significa «eficiencia estándar», mientras que IE4 se considera «eficiencia premium».

En 2011, la UE puso en vigor el primer tramo de regulación de esta directiva, obligando a todos los fabricantes de motores de ventilación a implementar un código IE mínimo de nivel 2. Este fue el primer paso para tener motores más eficientes. En 2015 la normativa se endureció hasta obligar a que los motores eléctricos de 7,5 kW o más cumplieran con IE3 o IE2 si tenían velocidad variable.

En este año se impusieron las últimas directrices de esta directiva acerca de los motores eléctricos. Desde entonces es obligatorio el uso de IE3, excepto en algunos casos.

¿Qué principales beneficios tiene la utilización de motores de ventilación IE3?

  • Gozan de una mayor eficiencia energética. Consumen menos aún desarrollando más potencia.
  • Son ecológicos. Reducen las emisiones de CO2.
  • Son más fiables al requerir de menor energía.
  • Los motores sufren menos y están menos forzados, por lo que duran mas tiempo.

Los beneficios de esta directiva de la Unión Europea son notables si se tienen en cuenta las previsiones del organismo comunitario. Hace 12 años, cuando se puso en marcha este reglamento, el consumo anual de la Comunidad Europea era de 1067 TWh. Los cálculos de la UE era que hasta 2020 el gasto hubiera crecido un 17,3% hasta los 1252 TWh. En cambio, gracias a las restricciones del código IE, se espera que para esa fecha el consumo no solo no haya aumentado, sino que se reduzca un 20%.

Para el consumidor, la compra de un ventilador que esté certificado como IE3 supondrá un mayor retorno de la inversión. Se supone que en la vida útil de un ventilador solo un 2,5% de su coste supone el precio de compra, mientras que sus costes energéticos serán hasta el 96% de lo que se invierta en él. En tres meses, un ventilador puede haber consumido en energía lo que costaba su precio. Por eso, el uso de motores de ventilación de alta eficiencia energética supone un beneficio económico incluso a corto plazo. Igual que lo son otros cambios que llegan gracias a las directrices de la Unión Europea, como el uso de los recuperadores de calor.