Humedad absoluta y relativa

Humedad absoluta y relativa

La humedad absoluta se define como el peso del vapor de agua contenido por unidad de volumen de aire, medido generalmente en Kg/m3. Se puede expresar también como el peso del vapor por unidad de peso de aire seco. Por su parte la humedad relativa es el cociente entre el peso del vapor de agua contenido en un volumen de aire y el peso del vapor saturado para ese mismo volumen, tal y como reflejado en la siguiente expresión matemática:

Z (%) = (Peso del vapor/Peso del vapor saturado) x 100

El confort higrotérmico

La temperatura seca del aire es aquella a la que se encuentra el aire que rodea a una persona. La diferencia que existe entre esta temperatura y la de la piel de un individuo determina el intercambio de calor que se produce con el ambiente. Es el denominado intercambio de calor por convección. El calor también puede ser intercambiado por radiación cuando dos superficies distintas, bien sea la piel, una pared o el techo, se encuentran a distinta temperatura. En este caso el calor se transfiere desde la superficie caliente a la superficie más fría. Por este motivo puede ser agradable en invierno estar en el interior de una vivienda cuyo interior está a 15 ºC, y las paredes a 22 º C, ya que de forma inmediata éstas radiarán calor hacia los objetos y las personas que se encuentran en el interior. La humedad también influye de forma activa en nuestra sensación de calor. Nuestro organismo elimina el exceso de calor a través de la transpiración que disminuye a medida que aumenta la humedad. Por este motivo es más agradable un ambiente con un calor seco que otro con un calor más húmedo.

La velocidad del aire por su parte influye notablemente en el balance térmico de nuestro metabolismo. Al incrementarse, aumentará también la capa de aire que nos aísla y aumentará la evaporación del sudor. Nuestra vestimenta también altera nuestra sensación de confort. Cuanta mayor resistencia térmica ejercen las prendas de vestir, más difícil le resulta a nuestro organismo ceder parte del calor al ambiente. De esta manera el confort térmico se puede alcanzar una vez que se consigue un equilibrio entre el calor que genera nuestro organismo debido a la cantidad de energía que necesitamos acumular para realizar nuestras actividades diarias, y el que es capaz de ceder al ambiente.

El confort higrotérmico es un aspecto muy importante a tener en cuenta dentro de los centros de trabajo. Para conseguirlo la temperatura debe estar comprendida entre 17 ºC  y 27 ºC si se realizan trabajos sedentarios, o entre 14 ºC y 25 ºC cuando se trata de trabajos ligeros. Los valores límites de humedad, a su vez están comprendidos entre el 30% y el 70%, salvo cuando existe cierto riesgo de electricidad estática, en cuyo caso no debe ser inferior al 50 %. En lo que se refiere a la velocidad del aire, debe mantenerse por debajo de los 0,5 m/sg en trabajos sedentarios, o por debajo de 0,75 m/sg en el resto de los casos.

 

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