Consejos para convertir nuestro hogar en vivienda sostenible

Nadie duda que el futuro de la construcción pasa por la eficiencia energética. La edificación ha de centrarse ante todo en lograr que los hogares y centros de trabajo puedan consumir el mínimo de suministros, y es por ello que a partir de 2020 se podrá en marcha la obligatoriedad de los Edificios de Energía Casi Nula. Sin embargo, ¿qué hacemos con el parque de viviendas actual? O, en el caso de querer construir una nueva casa, ¿cómo ponemos en marcha un plan de creación de una casa ecológica? Para ello, os ofrecemos unos muy buenos consejos para convertir nuestro hogar en una vivienda sostenible.

El medio ambiente está ahora mismo en la primera página de actualidad, por lo que el primer motivo para construir casas ecológicas es hacer que nuestro planeta sea más saludable y proteger al medio ambiente. Pero, para los usuarios finales, las viviendas sostenibles pueden ahorrarles muchísimo dinero en costes energéticos. Y si bien aún en muchos círculos se tiene la idea de que edificar construcciones ecológicas es más caro que seguir patrones tradicionales, en realidad no es así.

Otro gran beneficio de la edificación ecológica es que podemos mejorar la calidad de vida de las personas que viven en estos hogares. Algunos de sus beneficios a nivel de salud son:

• Se respira un aire de mayor calidad, que evita enfermedades.
• Las temperaturas son más naturales sin la necesidad de aparatos tradicionales de climatización.
• La humedad desaparece y también los malos olores.
• Se evita que entre contaminación procedente de los exteriores.
• Se goza de un mejor descanso y también de una mayor sensación de bienestar y concentración.

Es por ello que, si podemos, convertir nuestro hogar en una vivienda sostenible es algo que nos aportará beneficios económicos -gracias a la apuesta por la eficiencia energética que ahorra costes en las facturas de la luz- pero también nos otorgará una mayor calidad de vida.

6 consejos para convertir nuestro hogar en sostenible

Construir una casa ecológica es muy positivo por varios motivos, pero a nivel personal la salud mejora y también la economía de quienes utilizan dicho hogar. Al fin y al cabo, los edificios son los mayores contaminantes en nuestras ciudades, más incluso que el tráfico. Si todos optamos por viviendas sostenibles, las ciudades serán entornos mucho más limpios, además de que será posible ahorrar en suministros.

Al pensar en las casas ecológicas, hay que tener en cuenta que deben cumplir con dos requisitos:

1. Han de ser energéticamente eficientes. El consumo de suministros ha de ser mínimo, como se especifica en los Edificios de Consumo Casi Nulo.
2. Ecológicamente, han de respetar los recursos naturales de la zona donde se edifiquen. Por ejemplo, han de utilizar materiales sostenibles y que puedan obtenerse fácilmente por la zona.

Normalmente, todos los edificios que cumplen con la sostenibilidad de la zona son de gran eficiencia energética. A nivel normativo, el Código Técnico de la Edificación en lo que se centra es únicamente en la eficiencia energética. Sin embargo, los certificados energéticos voluntarios como BREEAM y Passivhaus sí que tienen en cuenta ambos factores, y son la mejor solución para tener unas líneas maestras sobre cómo implementar sostenibilidad en los hogares.

Pero, ¿qué podemos hacer para convertir nuestros hogares en sostenibles?

1. La ubicación es primordial. Años atrás, mucha gente decidió optar a viviendas más económicas lejos de sus centros de trabajo o de ocio. Una mala localización se traduce en un gasto económico mayor en transporte, además de una reducción del tiempo libre disponible.
2. El tamaño sí importa. Siempre que sea posible, evita los grandes espacios. Las casas pequeñas son mucho más sencillas de aclimatar, por lo que un terreno menor o una vivienda de tamaño contenido es capaz de ahorrar mucho. ¿Y si se trata de reformas? Convierte los grandes salones en estancias más pequeñas.
3. Aislamiento térmico. Es la primera gran técnica a implementar para convertir nuestros hogares en sostenibles. Si se hace desde la planificación inicial, es más fácil, pero incluso en viviendas ya construidas podemos mejorar las condiciones climatológicas con paredes aislantes, ventanas y puertas herméticas o techos protegidos. Una buena alternativa es la cubierta ventilada.
4. Apuesta por los sistemas de ventilación mecánicos. La renovación del aire es fundamental para la salud, pero es también una gran aliada para mejorar las condiciones climatológicas. La ventilación forzada de doble flujo puede otorgarnos aire cálido impulsado en casa durante el invierno y refrigerado en verano. Gracias a ella, con un coste mínimo es posible prescindir de la calefacción o el aire acondicionado en la mayor parte del tiempo.
5. Apuesta por la creación de energías renovables. Tanto la recogida de agua de la lluvia como por ejemplo la instalación de placas solares pueden conseguir que nuestras casas necesiten menos energía, pero sobre todo que sean ecológicas.
6. Iluminación LED y aprovechamiento de la luz natural. ¿Cuánto gastamos en bombillas? Si nos descuidamos, es el segundo mayor gasto en electricidad del hogar. Las alternativas LED pueden hacer que dicho consumo descienda, mientras que grandes ventanales y sistemas automáticos de persianas pueden ofrecernos un mayor aprovechamiento de la luz solar.

Es importante que tengamos en cuenta qué maneras tenemos para convertir nuestros hogares en sostenibles y así mejorar el parque de viviendas para una mayor eficiencia energética.