Airear las estancias

La necesidad de ventilar el hogar es mucho más notoria en la actualidad de como lo era antiguamente. Nuestras casas necesitan respirar, y el aire ha de ser renovado en cada una de las habitaciones, baños y cocinas. Históricamente, como ventilación era fácil que se llamara al proceso de abrir las ventanas un rato y dejar que entrara el aire de la calle. Pero eso es más airear las estancias que ventilar, ¿y son lo mismo?

Definitivamente, airear las estancias no es ventilar la casa. La renovación del aire ha de lograr básicamente que se extraiga aquel aire que haya perdido calidad en las estancias y que se cambie por aire procedente del exterior. Y eso, con tan solo abrir las ventanas, no es posible.

Airear, en cambio, es el efecto de abrir las ventanas para que el aire de la calle entre en casa. Aun así, eso no significa que se ventile el hogar, ya que no ha de significar que se produzca una renovación del aire. Si no hay viento en el exterior y solo está la ventana abierta, el aire exterior puede entrar dentro de casa y el interior salir, pero también puede simplemente estancarse el aire viciado sin que se produzca renovación alguna.

¿Significa eso que abrir las ventanas sea poco práctico? Para nada. En realidad, es la manera más sencilla de renovar el aire, pero se ha de plantear de una manera concreta, y teniendo en cuenta que airear un poco la estancia no significa ventilarla de manera eficiente.

La importancia de ventilar viene dada en que es la manera más eficaz de eliminar las impurezas que se almacenan en el aire de nuestro hogar. Para que  la acción de ventilar sea eficiente tendrán que ver varios factores, siempre con el objetivo de conseguir el hogar más saludable posible.

Si ventilamos nuestro hogar lograremos los siguientes beneficios:

  • Oxigenamos el aire y lo limpiamos de dióxido de carbono.
  • Cambiamos el aire en mal estado por un aire de calidad.
  • Mejoramos la humedad y corregimos los valores elevados que son nocivos para nuestro organismo y también para las estancias.
  • Quitamos el polvo y las estancias se libran de las partículas en suspensión.
  • Al ventilar nos llevamos los malos olores que se instalan en casa.
  • En general, potenciamos muchísimo nuestra salud, al poder contar con un aire beneficioso para nuestros pulmones y eliminar las posibles amenazas procedentes de enfermedades respiratorias.

Es muy importante que ventilemos todas las estancias de nuestras casas, ya que si no lo hacemos proliferará el polvo y también los ácaros y el polvo. Los gases tóxicos que se generan con el uso de desinfectantes y procedentes del cocinado ensuciarán el ambiente, además de que las alergias se multiplicarán. Los gases contaminantes han de eliminarse mediante la ventilación.

 

Cómo ventilar y airear las estancias en casa

 

Para garantizar una correcta ventilación en casa, la mejor opción sería contar con un sistema de ventilación mecánico, a ser posible de doble flujo. De esa manera, se garantizaría la correcta extracción del aire de manera automática, además de impulsarse aire desde el exterior filtrado previamente.

Sin embargo, la gran mayoría de hogares españoles aún no disponen de ventilación mecánica. En ese caso, aún podemos hacer muchas acciones para garantizar la renovación del aire en interiores.

El momento más adecuado del día y el tiempo que se debe dedicar a la ventilación dependen del tipo de clima local, el uso de la casa y la estación del año en que estemos.

  1. Ahora que se acercan las temperaturas frías, lo ideal es ventilar alrededor del mediodía, aprovechando cuando entra el sol. Así entrará aire más cálido y ganaremos en confort climático.
  2. En cambio, en los meses de verano hemos de ventilar abriendo las ventanas durante la noche, para utilizar el fresco del exterior y evitar el calor exterior a las horas más calurosas del día.
  3. ¿Cuánto tiempo es necesario ventilar? Para una estancia, bastan con diez minutos cada ocho horas aproximadamente. Pero si hay más personas hemos de ventilar más.
  4. En el caso de los dormitorios, es muy buena idea ventilar justo después de levantarnos y también antes de ir a dormir.

Pero, ¿cómo ventilamos? Si tan solo abrimos las ventanas, quizás no sea suficiente. Si no disponemos de ningún equipo de ventilación, lo ideal es que abramos una ventana en una pared y la puerta en la pared enfrentada. De esa manera el aire entrará y saldrá de la estancia, por lo que se renovará más eficientemente.

También hemos de entender que para airear las estancias y ventilar el hogar es preciso que antes, durante y después del cocinado las ventanas deberán estar abiertas. Si usamos productos químicos para limpiar la casa, igualmente las ventanas deben estar abiertas. De esta manera, podremos mejorar la salud y el confort dentro de nuestros hogares.