Arquitectura sostenible y ecológica

La arquitectura sostenible y ecológica es un reto de presente más que de futuro y en España la Administración ya empieza a implementar medidas tímidamente. Si bien aún no son más que buenas intenciones, se comenta que podría incentivarse la rehabilitación de edificios y la construcción de viviendas verdes para poder frenar el cambio climático. Al fin y al cabo, el mayor volumen de contaminación se produce en interiores y para tener ciudades más sostenibles necesitamos edificios ecológicos.

La arquitectura sostenible tiene dos fundamentos principales y va más allá de mejorar la eficiencia energética en los edificios, ya que promueve un cambio de paradigma económico, centrado en el aprovechamiento de recursos y en el respeto al medio ambiente. Básicamente se centra en:

  1. Máxima eficiencia energética. Todos los procesos de consumo que se desarrollen en un edificio sostenible han de ser de mínimo consumo. Se utilizan sistemas de ventilación mecánicos, materiales de alto aislamiento térmico, soluciones de recuperación energética y otras instalaciones para que el consumo sea nulo o mínimo.
  2. Aprovechamiento de los recursos locales. En la arquitectura ecológica y sostenible se va un paso más allá y se busca que todos los materiales utilizados hayan tenido un proceso constructivo en comunión con el medio ambiente y su extracción y producción se haya realizado en zonas locales.

De esta forma, la arquitectura ecológica pugna por un lado por un consumo racional y también por ir más allá del edificio en cuestión, para apoyar al medio ambiente. Sin embargo, ¿estamos preparados en España para un tipo de construcción de estas características?

El ejemplo perfecto lo encontramos en la Edificación de Consumo Casi Nulo, el conjunto de normas y directrices europeas que, a partir de 2020, hará que sea obligatorio en España que toda construcción cumpla con las estricta regulación europea que propone viviendas y centros de trabajo que prácticamente no consuman energía, sin la dependencia de la climatización tradicional.

Sin embargo, este marco normativo lleva mucho tiempo puesto en marcha y no han sido muchos los emprendedores y arquitectos que han apostado por ello hasta ahora, que llega la obligatoriedad. En otros países europeos, en cambio, no hizo falta forzarles por Ley.

En el caso de la arquitectura sostenible ocurre algo similar. Porque todos los edificios verdes son de consumo casi nulo, pero van mucho más allá en ello. La arquitectura va ligada a la demanda, y mientras el sector constructor no demande soluciones ecológicas y sostenibles, será difícil que encontremos propuestas de diseño y arquitectónicas enfocadas en mejorar el medio ambiente.

De aquí llega la necesidad de que sea la Administración pública la que fuerce una normativa en favor de la construcción ecológica, ya que de esa forma podríamos ver un cambio real. De momento, la concienciación puede partir de los propios individuos privados, que en el momento de construir un nuevo hogar pueden apostar por modelos sostenibles. Se trata de un primer paso no solo por contar con un hogar más beneficioso y de mínimo consumo, sino también de frenar el cambio climático.

 

La arquitectura sostenible y ecológica en Europa, ¿futuro de España?

 

Arquitectura de eficiencia energética

Si bien en España aún nos queda bastante camino por recorrer en la arquitectura ecológica y sostenible, ya tenemos proyectos destacables y muchos hogares que siguen protocolos para ser verdes. El espejo donde mirarse, igualmente, está en el norte de Europa, donde para combatir los climas fríos desarrollaron modelos ecológicos de manera muy temprana. En parte por ello el sello Passivhaus fue creado en Alemania, aunque en nuestro país tenemos excelentes ejemplos de cómo se ha llevado a cabo.

Mientras que Alemania es uno de los países con mayor solera en la edificación de eficiencia energética, Suiza es por ejemplo un gran modelo a seguir en cuanto a la construcción sostenible.

¿Qué características tienen los hogares ecológicos suizos? Primero de todo, que la ventilación se realiza de manera mecánica y se puede estar constantemente con las ventanas cerradas. También que se trata de edificios muy herméticos, por los que no penetra el frío extremo que se vive en el país, con paredes selladas y puertas y ventanas especiales.

En Suiza, además, existe una gran disponibilidad de materiales ecológicos de los que abastecerse. Por ejemplo, la madera, que además de sus grandes propiedades ofrece una imagen mucho más agradable de los interiores en sí mismos.

En España también es posible encontrar materiales sostenibles para apostar por la construcción verde, además de apostar por la eficiencia energética. Es por ello que, si hay un cambio real en la normativa propuesta por las administraciones, posiblemente en breve podamos encontrar proyectos de arquitectura sostenible y ecológica que mejoren el bienestar de las personas, a la vez que ayudan a la recuperación del medio ambiente. Sobre todo en las ciudades, donde es importante respirar mejor y ganar en calidad de vida.