Ventilación contra el gas radón y otras formas de protegerse

El conocimiento de las causas y orígenes del gas radón es cada vez más una necesidad imperante en España, con proyectos destinados a conocer cómo se propaga este veneno. Habiendo sido hasta hace muy poco un gran desconocido, ahora se conoce que este veneno es casi indetectable y que está presente en muchísimos territorios españoles. ¿La mejor manera para combatirlo? Sin duda, renovando el aire. La ventilación contra el gas radón es la solución más eficaz para eliminar esta amenaza.

Un peligro latente que puede ocasionar daños muy graves. El gas radón puede hacer estragos en nuestro sistema respiratorio y está considerado como el segundo mayor causante de los casos de cáncer de pulmón en España, según la Organización Mundial de la Salud. Y quizás sus dos mayores problemas sean el desconocimiento y lo difícil que es de detectar.

Sobre lo poco conocido que es el gas radón, podemos decir que es relativamente reciente su presencia, ya que solo hace tres décadas que lo conocemos, si bien ha estado con nosotros desde siempre. Y la regulación en contra de sus efectos nocivos es aún muy reciente.  En cambio, en la región central de España y en toda la zona que se encuentra cerca de Portugal, la concentración de radón es muy elevada. Puedes consultar dichas regiones en el mapa del gas radón.

Acerca de cómo detectar su presencia, el reto es mayor. Y es que se trata de un gas que no huele, no tiene color ni forma, no impregna las paredes o el mobiliario y solo es detectable con equipo profesional, además de tardar bastante en conocer su presencia. Es por ello que, desde las autoridades, se solicitan los siguientes procesos:

• Es necesaria una campaña informativa para crear concienciación entre los usuarios.
• La búsqueda de zonas afectadas por el gas radón es importante, y los datos se muestran en la página del Consejo de Seguridad Nacional.
• Han de ofrecerse ayudas públicas a aquellos edificios afectados para que puedan mejorar la situación de sus hogares.
• El Gobierno ha de facilitar los sistemas de detección del gas radón.

Sin embargo, la detección de este veneno es complicada, por lo que protegerse para combatir el gas es una opción que debería contemplarse. La ventilación contra el gas radón es la mejor solución para evitar este problema, ya que el radón se encuentra en el aire y solo renovándolo nos aseguraremos de que podamos solventar este problema.

El gas radón se origina bajo tierra y los hogares más afectados son aquellos que tienen sótanos o plantas inferiores. En algunos de estos lugares se origina el gas radón y se filtra a través de paredes o puertas hacia otras estancias del hogar.

¿Por qué es importante la ventilación contra el gas radón? Los sistemas de ventilación mecánica extraen el aire de mala calidad y hacen que circule el aire renovado. Mediante los ventiladores de extracción se elimina el aire en interiores que ha perdido calidad y se renueva con el que procede de exteriores, ya sea a través de rejillas de ventilación que conectan con el exterior o mediante sistemas de ventilación de doble flujo.

Mejorar nuestras casas para combatir el gas radón

La ventilación contra el gas radón es la manera más eficiente de evitar los daños que puede originar en nuestros pulmones la presencia de este veneno que es casi indetectable. La renovación del aire logra que podamos evitar problemas en nuestros hogares y que no debamos lamentar problemas respiratorios e incluso casos de cáncer de pulmón.

Además de la renovación del aire, existen otras opciones para poder mejorar nuestros hogares en caso de vivir en una zona afectada por el gas radón:

• Lo imprescindible es mejorar la ventilación. Primero en la zona subterránea -que es donde se origina el veneno- pero también en las habitaciones y salones.
• Es posible instalar sistemas de ventilación de extracción mecánica que eliminen el aire del subterráneo.
• Toda filtración que pueda producirse desde el sótano ha de taparse. Desde pequeñas fisuras hasta grandes grietas, cualquier filtración puede ser letal. De la misma manera, podemos despresurizarse el espacio entre el suelo del edificio y el terreno para ayudar a que el gas no se expanda por las habitaciones.
• Por último, también es posible sellar las paredes para que el gas no se filtre y se quede en la zona subterránea.

Es imprescindible proteger nuestros hogares para evitar la entrada de este veneno y, si desconocemos la afectación, podemos utilizar sistemas de ventilación contra el gas radón, que además mejorarán nuestra salud y confort en el hogar al poder respirar un aire de mayor calidad.