Eficiencia energética en la ventilación de doble flujo

La búsqueda de unos edificios que sean mucho más respetuosos con el medio ambiente y que tengan un consumo moderado es el principal reto de la construcción actual. Tanto la normativa europea como las directrices del Código Técnico de la Edificación marcan que la sostenibilidad y un consumo razonable son pilares básicos de la edificación. Para ello, la ventilación mecánica es un requerimiento obligatorio, si bien para lograr maximizar la salubridad y encontrar una forma de climatizar en interiores de manera ecológica, hemos de confiar en la eficiencia energética en la ventilación de doble flujo.

Ante todo, ¿qué supone la eficiencia energética en el hogar? Un mayor ahorro de costes en los suministros del hogar, que se considera necesario por diversos factores:

1. Los edificios son el mayor foco de contaminación en nuestras ciudades. Para mejorar los niveles de polución y para mantener un consumo sostenible, hemos de encontrar formas de suministrar energía a nuestras casas y centros de trabajo de manera más asumible.
2. El gasto de la factura de la electricidad y otras fuentes energéticas se ha disparado en los últimos años. Se considera que, si el aumento de precios continúa, algún día todos los hogares que no sean energéticamente eficientes podrían estar en situación de pobreza energética.

La concienciación en eficiencia energética es fundamental para no agotar los recursos naturales y poder mantener un desarrollo saludable. En los edificios son muchas las acciones que pueden realizarse, como:

• Uso de sistemas y electrodomésticos de bajo consumo. Desde las bombillas hasta la lavadora y el frigorífico.
• Mayor estanqueidad en las construcciones. El mayor consumo se produce en la climatización, por lo que hacer que nuestros hogares sean más herméticos nos ahorra costes energéticos en sistemas tradicionales que generan grandes consumos, como son el aire acondicionado y la calefacción.
• Sistemas de energía renovable. En los edificios es posible recoger el agua de la lluvia o instalar placas de energía solar, por comentar algunos ejemplos de los más comunes.
• Instalación de sistemas de ventilación mecánica, y especialmente de doble flujo.

La necesidad de los sistemas de ventilación mecánicos se origina en la mayor estanqueidad de los edificios, para así garantizar el correcto flujo de aire que se necesita para disponer de estancias más saludables. Sin embargo, en los sistemas de ventilación de doble flujo no solo mejoramos la salud y garantizamos una correcta circulación del aire, sino que también mejoramos la climatización y podemos dejar de depender de los sistemas tradicionales de aire acondicionado o calefacción.

La eficiencia energética en la ventilación de doble flujo se garantiza mediante el paso del aire en dos conductos diferentes, uno de admisión y otro de extracción. Gracias a ello, es posible también mejorar las temperaturas en interiores. Y con ello lograr una climatización eficiente.

¿Cómo funciona la eficiencia energética en la ventilación de doble flujo?

Las funciones de la ventilación mecánica son diversas, si bien la principal es lograr una renovación del aire que garantice la seguridad de las personas en interiores. Hay que diferenciar primero entre los diferentes tipos de sistemas de ventilación:

• Sistemas de ventilación híbrido. Utiliza sistemas mecánicos junto a métodos de circulación del aire naturales. Por ejemplo, la admisión puede realizarse de manera natural, mientras que se extrae el aire en malas condiciones de manera mecánica. En condiciones favorables, el sistema mecánico no actúa y permite que la renovación del aire se haga de manera natural.
• Sistemas de ventilación mecánica de flujo simple. En este caso, la extracción del aire se realiza de manera mecánica en todo momento. No hemos de preocuparnos en ningún momento por ello, mientras que la admisión de aire se realiza mediante rejillas de entrada que conectan el exterior con cada una de las estancias, ya que para un correcto funcionamiento las ventanas han de estar cerradas.
• Sistemas de ventilación mecánica de doble flujo. Son aquellos en los que la admisión y la extracción del aire se realizan de manera mecánica y automatizada.

Es posible garantizar una buena eficiencia energética en la ventilación de doble flujo gracias al uso de unidades de recuperación de calor e incluso gracias a los efectos de deshumidificación, en caso de ser necesarios.

Mediante el uso de uno de estos sistemas es posible limitar el uso de los sistemas tradicionales de calefacción y aire acondicionado. E incluso eliminar el consumo de energía en climatización para la mayoría de situaciones sin coste. Es por ello que la ventilación de doble flujo es muy común para proyectos residenciales sostenibles como los registrados en Passivhaus o los del sello certificador BREEAM.

Características eficientes de la ventilación de doble flujo

La ventilacion mecánica garantiza la circulación de aire para mejorar nuestra salud, pero la eficiencia energética en la ventilación de doble flujo se logra gracias al control del aire que se introduce en las estancias, además de poder extraer aquel en peor estado.

¿Qué funciones principales incorpora la ventilación de doble flujo?

• Análisis automático de la situación del aire en el hogar. Mediante el uso de sondas y sensores, se conoce cuáles son las condiciones dentro de cada estancia. La temperatura, la humedad y la calidad del aire son monitorizadas para conocer las necesidades reales de aire.
• Admisión de aire con caudal constante. La introducción de aire en el hogar se realiza en función de la situación particular en cada momento. El caudal de entrada se ajusta en función de lo que se necesite en cada momento.
• Aire limpio y de calidad. Al introducir el aire, se filtra antes de que entre en el hogar. El filtrado se adaptará al nivel de polución que incluya el aire. De la misma manera, el confort es mayor porque también se evita la entrada de mosquitos y otros insectos, además de las partículas nocivas e incluso malos olores, en función del tipo de filtro utilizado.
• Extracción del aire en malas condiciones. El sistema también se adapta a la calidad del aire interior para saber qué cantidad ha de extraer en todo momento. De esta forma, si hay humos o restos del uso de productos de limpieza en el aire, la extracción mecánica eliminará ese aire para que sea de la mayor calidad. Incluso gracias a la ventilación de doble flujo se logra que nunca más se empañen los cristales.
• Calefacción. Es una de las ventajas de eficiencia energética en la ventilación de doble flujo, ya que en invierno es posible calentar el aire que se introduce desde el exterior. La mejor manera para ello es mediante una unidad de recuperación de calor, que es capaz de calentar el aire del exterior simplemente con el consumo energético de los ventiladores. El aire que se introduce llega calefactado a las estancias.
• Refrigeración. De la misma manera, el aire en verano puede enfriarse al entrar en las estancias, por lo que evitamos el consumo de aire acondicionado con el mismo sistema.

Es por ello que, gracias a los sistemas de ventilación de doble flujo podemos evitar el uso de aparatos de aire acondicionado y de calefacción. Se calcula que hasta en un 90% del calor puede ser recuperado gracias a este sistema, por lo que lo convierte en la mejor opción a nivel de eficiencia energética.

Un ejemplo que nos indica la importancia de la eficiencia energética en la ventilación de doble flujo es que, en las hipotecas energéticas -cuyos intereses mejoran en función de la sostenibilidad del edificio-, el descuento más alto solo puede obtenerse si la vivienda cuenta con un sistema de ventilación mecánica de doble flujo.

Comodidad y sostenibilidad en la ventilación de doble flujo

Según el Código Técnico de la Edificación, en su Documento Básico HS3, todos los edificios actuales han de contar con sistemas de ventilación, como hemos comentado previamente, para garantizar la salubridad en interiores. Aun así, es importante destacar que para maximizar el consumo energético la mejor solución es la ventilación de doble flujo.

Además de sus beneficios en salud de eficiencia energética en la ventilación de doble flujo, la comodidad en el hogar también es otro de sus aspectos a destacar:

• Un sistema de doble flujo junto a una unidad de recuperación de calor es una solución integral. En ningún momento se pierden cargas energéticas, de la misma manera que al realizarse la instalación en base a las necesidades de cada construcción se logra que no existan zonas donde no actúe la ventilación mecánica.
• La ubicación de los equipos de doble flujo puede realizarse de manera que no afecte a la comodidad de la vivienda. Por ejemplo, la unidad de recuperación de calor puede estar en una zona de interiores y climatizada para evitar que le afecte la temperatura exterior, mientras que los ventiladores de admisión y extracción pueden estar en una zona no habitable, como son los garajes. De esta manera, el ruido no molestará en ningún momento.
• Asimismo, también es más manejable separando los diferentes equipos del sistema de ventilación.

Si contamos con una buena instalación profesional de nuestro sistema de eficiencia energética en la ventilación de doble flujo sin duda podemos obtener aun más beneficios. Además de conseguir un aire de mayor calidad y filtrado antes de entrar en el hogar, logramos atemperar el aire que entra en cada estancia, ya sea verano o invierno. Y también abandonamos problemas y molestias sonoras por el uso de ventiladores, algo muy común en la climatización tradicional.

Para maximizar la eficiencia energética en la ventilación de doble flujo es preciso, en todo caso, un estudio profesional que analice las características específicas de cada uno de los hogares o centros de oficinas. Sin embargo, es una solución que combinada con una buena estanqueidad logra que el consumo energético sea mínimo.