Electricidad estática en el aire

A todos nos ha ocurrido alguna vez que hemos recibido un calambre inesperado. Al tocar una puerta, al agarrarnos a una barandilla en la calle o incluso al tratar de abrir la puerta de una nevera. También nos ha podido pasar al tener contacto con otra persona, con chispazos a veces incluso sonoros. Porque los seres humanos somos bioeléctricos, y eso significa que tenemos buena conducción eléctrica. Absorbemos electrones y protones a través de la piel y atraemos la electricidad estática en el aire que nos rodea. ¿Es eso bueno o malo? Depende y está relacionado con el proceso físico de la ionización.

Sufrir un paso de corriente eléctrica no tiene mayores consecuencias, más allá de lo anecdótico de la situación. Sin embargo, en nuestros hogares o espacios de trabajo puede indicar que hay un problema, ya que puede avisarnos de que algo dañino puede estar ocurriendo.

Primero de todo, ¿qué es la electricidad estática en el aire? Tanto las personas y seres vivos como los objetos estamos compuestos por átomos. Y estos átomos contienen protones, electrones y neutrones. Los protones tienen carga eléctrica positiva, mientras que los electrones cuentan con carga de electricidad negativa. Los electrones no contienen carga alguna.

 
Cómo elegir sistemas de ventilación
 

Más allá de la explicación técnica, hemos de tener en cuenta que si recibimos una fuerte entrada de protones en nuestro organismo sufriremos más irritabilidad, seremos propensos al malestar y a la depresión y, además, estaremos más desprotegidos frente a enfermedades pulmonares.

Desgraciadamente, los que viven en ciudades son los más propensos a recibir cargas eléctricas positivas (protones), y es por eso que es necesario tener esto en cuenta. En los entornos rurales, en cambio, es más común que el aire contenga electrones, y este tipo de carga eléctrica, en cambio, nos favorece.

El proceso de recibir cargas eléctricas positivas o negativas se conoce como ionización, y puede afectar enormemente en nuestro bienestar. Y dicha ionización, que genera diferencias en nuestra carga eléctrica, es lo que produce la electricidad estática en nuestros cuerpos. Por eso, cuando nos referimos a la electricidad estática en el aire queremos referirnos a que existe un número elevado de protones o electrones, que provocarán este desbarajuste en nosotros.

Si sufres golpes de corriente de manera frecuente y crees que padeces demasiados calambres accidentales cuando estás en exteriores, te recomendamos lo siguiente:

  1. No vistas con tejidos 100% sintéticos. El algodón o la lana son mejores alternativas para evitar la entrada de corriente.
  2. Las descargas eléctricas pueden minimizarse con la aplicación de crema hidratante en nuestra piel, igual que con toallitas suavizantes.
  3. Evita el uso de calzado con la suela de goma. Este material no permite que se descargue la electricidad de nuestro cuerpo. Así que si caminas por una ciudad con zapatillas de goma no dejarás escapar los protones almacenados que te producen malestar.
  4. Si tocas algún objeto metálico, como monedas o la carrocería del coche, permitirás que se vaya la electricidad estática.
  5. Estar en contacto con la naturaleza elimina la electricidad estática acumulada en nuestro organismo.

Aun así, el problema de la electricidad estática -que significa que se produce ionización– es diferente si ocurre dentro de nuestro hogar. En ciudades, por ejemplo, eso significaría una alta carga de protones, lo que afectaría a nuestro bienestar.

 

Reducir la electricidad estática en el aire de nuestras casas

 

Es importante tener en cuenta que la sequedad es una de las principales causas de que la electricidad estática se concentre en un espacio. Cuanto más seco es el aire -y sobre todo en invierno con el uso de climatizadores- la corriente se concentra en el aire. Lo ideal es utilizar un humidificador. En caso de no poder contar con uno, siempre puedes apostar por tener plantas que mejoren el aire de tu hogar.

Las alfombras y las moquetas son verdaderos enemigos del aire limpio. Si decides optar por ellas, necesitas tener mucho cuidado, y de cara a la electricidad estática lo ideal sería aplicar tratamientos químicos antiestáticos.

Igualmente, los tapizados también almacenan la electricidad estática. Puedes rociar el mismo producto antiestático o pasar toallitas húmedas en sofás, cojines y sillones.

Sin embargo, la mejor manera de disfrutar de un ambiente en nuestros hogares que sea saludable y beneficioso -además de energéticamente eficiente- es un sistema de ventilación mecánico, sobre todo si es de doble flujo. Gracias a este tipo de solución, podemos controlar el nivel de aire que introducimos en casa y eliminarlo cuando no está en las condiciones adecuadas.

Los sistemas de ventilación mecánicos también pueden controlar el nivel de humedad, por lo que ayuda a eliminar la electricidad estática y los problemas de ionización en interiores. Porque, si vivimos en ciudades, pasar mucho tiempo en entornos cargados de protones pueden acabar siendo perjudicial para nuestra salud. Y es precisamente esta electricidad estática la que nos avisa de que quizás tengamos un exceso de carga eléctrica positiva.

 
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