Enfriamiento adiabático

Explicado de manera técnica, el enfriamiento adiabático es aquel que se logra al evaporar el agua que reside en el aire. Algo que, obviamente, hace que el clima sea menos seco y aumentará la humedad. Y es por ello que también se le denomina enfriamiento por evaporación. Esto es porque el agua lanzada se evapora en el ambiente y lo vuelve más húmedo.

Se trata de un proceso ante todo técnico termodinámico y que se suele realizar en entornos industriales. Aun así, el enfriamiento adiabático en la climatización de edificios es también una realidad, ya que ayuda a mejorar la sensación térmica y a refrescar estancias.

Los procesos adiabáticos son, técnicamente, aquellos que impiden que se transfiera calor con el entorno. Y si bien en la industria suelen incluir técnicas relacionadas con, por ejemplo, combustibles o diferentes presiones en un gas, en la edificación son mucho más sencillos de entender. En climatización se trata de aportar vapor a la estancia.

El ejemplo más habitual de un enfriamiento adiabático en aspectos relacionados con la climatización son los aspersores de vapor que hay en muchos edificios y oficinas.

 

El enfriamiento adiabático en la climatización

 

Aspersores enfriamiento adiabático

Si añadimos agua al aire y luego es evaporada se produce una reacción física que es la que podemos denominar como enfriamiento adiabático. Y eso suele lograrse mediante la pulverización de gotas de vapor -o también de agua- a través de los habituales aspersores. Similares a los de riego, pero instalados normalmente en los techos y que pulverizan únicamente vapor o micro-gotas de agua.

Además de los aspersores, disponemos de otras técnicas para lograr este proceso termodinámico. Uno de ellos es el empleo de paneles humedos por los que atraviesa el viento o la corriente de aire. En cualquier caso, para que sea un proceso adiabático de enfriamiento es necesario que se cumpla la premisa principal: aumenta la humedad y disminuye el ambiente seco.

Los procesos de enfriamiento adiabático en climatización pueden encontrarse aplicados al aire de aportación, lo que se denomina enfriamiento adiabático directo, o bien aplicados a sistemas de doble flujo con recuperador de calor, enfriando el aire de extracción previamente a su paso por el intercambiador de calor, en tal caso se denomina enfriamiento adiabático indirecto. Así funciona:

  1. A través del sistema de climatización se dispara el aire seco. En el aspersor, se lanzan gotas de agua diminutas o vapor, en el caso de ser este el medio utilizado. Si se trata de un panel, la corriente de aire disparada por ventilación atraviesa la superficie húmeda.
  2. El aire aumenta su nivel de humedad, y junto a la circulación de aire seco en el exterior provoca la evaporación directa de las micro-gotas de agua.
  3. El aire se enfría y aumenta la humedad.

Esta forma de enfriar el aire es muy distinta a la de los equipos de aire acondicionado, que gastan mucha energía en los compresores de frío. En este caso, solo se necesita la energía de ventilar el aire y de emanar agua.

 

Pros y contras del enfriamiento adiabático

 

Este proceso termodinámico en la climatización es económico y muy funcional.Sin embargo, no es la solución perfecta para cualquier ambiente. Puede ser una buena alternativa en determinados ambientes y climas.

  • Es muy barato. La instalación no requiere de grandes artificios y un equipo de enfriamiento adiabático en la climatización gasta muy poca energía. Menos que casi cualquier electrodoméstico común.
  • La temperatura puede disminuir entre 2º y 10º centígrados, dependiendo de dónde se instale.
  • Suele funcionar bien en ambientes al aire libre, así que es apto para terrazas en verano.

Sin embargo, el enfriamiento adiabático tiene algunas debilidades difíciles de superar:

  • Es idóneo para climas muy secos en verano. Sin embargo, su uso en temperaturas muy húmedas -como las de las costas españolas- no tiene muchos beneficios, ya que el clima es húmedo antes de que se realice el proceso termodinámico.
  • La disminución de temperatura con este método tiene unos límites. Si se utiliza en días de calor seco puede ayudar y mucho. Pero si es uno de esos mediodías calurosos hasta el extremo puede que no se note y que sea necesario el uso de aires acondicionados.
  • Hay que cerciorarse de que el agua pulverizada esté libre de bacterias.

En cualquier caso, el enfriamiento adiabático en climatización es muy útil y práctico en muchos casos, y un perfecto complemento a otros sistemas de ventilación y aire acondicionado.